Las calacas chidas ya impactaron en la política mexicana, la neta ya se están apropiando de los memes sin saberlo y esto no lo podemos permitir, y es que en medio de la agitación política que caracteriza el panorama electoral mexicano, un fenómeno digital, que surge de manera irónica, ha tomado relevancia en el ámbito público: las famosas "calacas chidas".
Estos memes, que originalmente surgieron como parte de la cultura de internet, han escalado a la esfera política de una manera inesperada, convirtiéndose en el epicentro de controversias y acusaciones entre candidatos y personajes que tienen enorme peso en el ámbito político nacional (e internacional).
El pasado domingo 28 de abril, durante el segundo debate presidencial, la candidata de Fuerza y Corazón por México Xóchitl Gálvez (PAN, PRI y PRD), volvió a utilizar este meme para atacar a su contrincante, Claudia Sheinbaum, del partido MORENA.
Gálvez insistió en que el meme de las "calacas chidas", aparentemente inocuo y desprovisto de intenciones políticas o religiosas, evidencia a MORENA como un "narco partido".
El episodio del debate presidencial reveló una polarización política que ha llevado a los candidatos a recurrir a cualquier recurso disponible para desacreditar a sus oponentes. La estrategia de Gálvez de utilizar un meme popular para señalar presuntos vínculos con el narcotráfico por parte de su rival refleja la intensidad de la contienda política en México.
Sin embargo, es importante destacar que el origen de este meme es completamente ajeno a cualquier agenda política y ya tiene varios años recorriendo diferentes espacios de las redes sociales.
Con origen en foros de Shitposting, una suerte de humor digital que recurre a la irreverencia y carencia de sentido para generar risas, surgen las calacas chidas que hoy tienen preocupada y ocupada tanto a políticos mexicanos, como a la sociedad que aún no comprende que se trata de un tipo de humor.
Por lo que las aseveraciones donde se dice que este tipo de mensajes están vinculados con crimen organizado, sectas religiosas o violencia, son falsas. Las "calacas chidas" son simplemente esqueletos en situaciones humorísticas acompañados de frases cómicas, que no contiene carga política o religiosa que se pueda afiliar a candidatos o partidos políticos.
Y todo esto empezó porque ALGUIEN se tomó en serio la playera de Camisetas Pendejas donde se puede leer “Un hombre de verdad no habla mal de López Obrador”, y de inmediato comenzaron a vincular el meme con el culto a la Santa Muerte, que ha tomado popularidad sobre todo en la capital mexicana en los años recientes.
Esto generó que el meme y la playera, se tomaran tanto como una forma de propaganda por parte de AMLO como también una apología al crimen organizado, esto vinculado a diferentes contextos políticos y sociales.
Xóchitl Gálvez (@XochitlGalvez) acusa a Claudia Sheinbaum de ser la candidata un “narcopartido”. “Además le rinden culto a la Santa Muerte”.#DebateINE pic.twitter.com/CIomIt2krn
— Joaquín López-Dóriga (@lopezdoriga) April 29, 2024
A pesar de las críticas y las acusaciones, en México la Constitución protege la libertad de culto, siendo este un derecho fundamental en cualquier democracia. Pero se ha criticado el hecho de que un meme se convierte en objeto de debate político no debería seguir este principio. En lugar de ello, debería ser un recordatorio de la diversidad de opiniones y la riqueza del debate público en una sociedad democrática.
Por su parte, la página creadora de las camisetas ha crecido su popularidad en redes sociales, su principal medio de difusión y donde han dado a conocer más diseños que podrían ser catalogados como provocadores ante los hechos recientes.
Sin embargo ¿que quiere decir esto para los usuarios de redes que serán parte de las elecciones? ¿Qué cuentan con opciones que no se han acercado a las redes sociales o que también consideran determinados cultos como satánicos sin posibilidad a la apertura?
