Sin duda alguna, Taylor Swift es la artista más destacada de la última década dentro del ámbito del entretenimiento, rompiendo records musicales y de ventas, la cantante originaria de Pensilvania se ve envuelta en una controversia, nuevamente, por sus emisiones de CO2.
En 2022 se publicó un reporte de Yard que señaló a Swift como la celebridad que más contaminación de dióxido de carbono emite, con emisiones 1,100 veces superiores al de una persona común.
Ante esta situación y siendo Taylor una figura tan importante de la farándula, desde noviembre la cuenta @SwiftJetNextDay inició en X un seguimiento detallado de los vuelos que la cantante tomaba para transportarse por los Estados Unidos. En los datos se acotaba tiempo aproximado de vuelo, cuánto combustible se utilizó, costo del combustible y cuantas toneladas de CO2 se emitieron por vuelo.
Esta información destacó sobre todo ante la relación que Taylor y el deportista Travis Kelce mantienen y donde se ha podido ver a la cantante en varios partidos alrededor del país acompañando a su novio pero sobre todo en el marco del Super Bowl LVIII donde los Chiefs de Kansas City se enfrentan a los 49ers de San Francisco, en las mismas fechas que Taylor se encuentra presentando su Eras Tour en Japón.
Ante la expectativa de los fans de ver a la intérprete en el juego más famoso de la NFL, comenzaron a realizarse cálculos para saber si era posible que Taylor llegará a tiempo para encontrarse con Travis.
De esta manera, fue que resurgieron los datos donde se mencionaba a Taylor Swift como la artista que más emisiones de CO2 o gases invernadero genera para el planeta, siendo miles de veces superiores a las que una persona promedio haría en el lapso de un año.
Tras reaparecer esta información, comenzaron críticas fuertes contra la cantante y con el surgimiento de la cuenta en X que sigue la actividad, el equipo legal de Taylor Swift decidió enviar una nota de cese y desista a Jack Sweeney, la persona responsable de la cuenta.
Previamente, Sweeney había abierto cuentas para hacer seguimientos de otros famosos como Kim Kardashian, Donald Trump, Mark Zuckerberg y sus emisiones de carbono en vuelos. Las cuentas correspondientes a estos artistas en Facebook e Instagram continúan activas mientras que las de Swift fueron dadas de baja.
No obstante, el viaje del amor de Taylor Swift podría significar una emisión aproximada de 90,718 kilos de dióxido de carbono, 14 veces más de lo que emitirá un hogar estadounidense promedio en un año.
De acuerdo a las políticas de privacidad de redes sociales a las cuales Sweeney tuvo que apegarse para conservar sus cuentas, los datos de seguimiento se publican con 24 horas de retraso para no poner en peligro la integridad de los famosos implicados en el seguimiento.
Sin embargo, se dio a conocer mediante Reddit la carta que Jack Sweeney, de 21 años y estudiante de la Universidad de Florida, recibió por parte de Venable LPP, firma que atiende los asuntos legales de Swift. Está misiva está fechada al día 22 de diciembre de 2023.
En el texto se puede leer que se le señala por acoso y acecho a las actividades de la cantante por lo que se le pide que cese y desista de realizar el seguimiento, ya que las actualizaciones en tiempo real “son un peligro de vida o muerte” para la empresaria, al mismo tiempo destacan que no hay razón para hacer pública dicha información siendo que “no aporta a nada más que al acoso y a ejercer dominio y control” sobre su clienta.
También destacaron que pese a que Taylor ha tenido que lidiar con acosadores desde su adolescencia, la aparición de la cuenta de seguimiento de sus vuelos le ha causado gran estrés emocional.
A través de representantes, Taylor ha destacado la compra de bonos de carbono, esto a manera de resarcir el daño causado con las emisiones de gas invernadero.
Los bonos de carbono son una manera de comprar acciones para organizaciones que se dedican a la concientización y ejercer acciones para desacelerar el calentamiento global, no obstante, no parecen ser suficientes en el contexto de es una de las celebridades que más contamina, mientras surgen campañas para que la población promedio reduzca su producción de desechos.